miércoles, 15 de mayo de 2013

EL PRECIO DE ESTAR A LA MODA

El otro día les comenté por arriba sobre esto que había pasado en Bangladesh. Según lo que afirman, el peor accidente en la historia de la industria. Un edificio en el que trabajaban más de 3.500 personas, se derrumbó parcialmente y murieron (o al menos son los cadáveres que pudieron contar) más de 1127 trabajadores.


Bangladesh es uno de los países con mayor producción textil y sus trabajadores tienen los sueldos más bajos. Por supuesto lo último explica lo primero: el capital busca los lugares con sueldos bajos para poder producir más cantidad a más bajo costo y aumentar de esta formas las ganancias. En este lugar se confeccionaba ropa para conocidas marcas europeas como Benetton, Mango, Primark o El corte inglés, entre otras.

Copio de la siguiente nota estos datos: http://www.minutouno.com/notas/287213-cesan-los-rescates-bangladesh-1127-trabajadores-muertos



"La mayor parte de los bengalíes cobraba un promedio de 40 dólares al mes. Los más chicos, lógico, no llegaban a 30. La comisión especial que formarán sindicalistas, empresarios y Gobierno, estipula –sin confirmación- que llevarán los salarios hasta los 60 o 70 dólares mensuales. Un incremento notable para los obreros peor pagos del mundo. Los trabajadores piden 100 dólares: la condición de vida no mejorará mucho." 




Creo que esto amerita una reflexión un poco más profunda sobre nuestras propias responsabilidades.


En nuestra sociedad el trabajo es casi siempre una relación social.
Uno trabaja con otros: en una empresa, en un colegio.
Para otros: uno es "empleado", "usado", que no casualmente es su sinónimo.
Otros trabajan para uno: uno es "empleador", "usador".
El producto del trabajo es para otros.
Lo que compramos está hecho por otros.

Es muy raro que el trabajo sea solamente lo que hago yo para mí. El otro está siempre presente en el trabajo y cuando el otro está entramos en el horizonte de la ética:

¿CÓMO ME COMPORTO? ¿QUÉ RESPONSABILIDADES TENGO?

Me gustaría hablar entonces sobre nuestro comportamiento y responsabilidades ante algunas situaciones.

Conocemos algunas de las condiciones en las que trabaja mucha gente:

- EN NEGRO
- EXCESIVAS HORAS
- CON SUELDOS MUY BAJOS
- SUFRIENDO MALOS TRATOS
- REALIZANDO TRABAJOS PELIGROSOS

Todas estas condiciones tienen como contracara que otra persona obtenga un beneficio: más dinero.

No es un problema "del gobierno" y "los empresarios", es decir, algo lejano a nosotros, que solo podemos mirar desde lejos y lamentarnos "¡qué barbaridad!".



Aunque nos pueda parecer lejano y fuera de nuestro ámbito, todos nosotros directa o indirectamente contribuimos a apoyar y mantener estas condiciones de trabajo de millones de personas. Veamos de qué maneras.


1) COMO EMPLEADORES: intentando obtener los máximos beneficios a cualquier costo, no sólo en una empresa, sino por ejemplo cuando contratamos a alguien para que limpie y cocine en nuestra casa.

¿Estamos dispuestos a pagar un salario más alto aunque eso signifique resignar el poder comprar el último modelo de celular? ¿Nos vamos a aprovechar de la situación de una persona que no tiene otro remedio que aceptar el trabajo de limpiar el baño de una casa ajena, para pagarle lo menos posible?

2) COMO CONSUMIDORES: Dedicamos gran cantidad de tiempo y de trabajo en averiguar qué ropa está de moda, cuál es el mejor destino para ir de vacaciones y con qué vino combina mejor tal comida.
¿Por qué no averiguar bajo qué condiciones se fabrica la ropa que compramos, cómo afecta el turismo a las economías originarias de los lugares donde vacacionamos, cómo viven los que cosechan las uvas con las que se hac el vino que tomamos?
De las cosas que compramos ¿Por qué no exigimos que estén fabricadas por trabajadores bien pagos, en condiciones adecuadas?
¿Por qué estamos dispuestos a pagar más por el mismo producto de una marca que por el producto de otra basándonos solamente en el prestigio del mismo y no en cómo una u otra empresa trata a sus trabajadores?

¿Por qué no compramos tapados de piel si involucra la muerte de un animal, pero sí compramos ropa donde está en juego la vida de las personas?
Algunas de las conocidas marcas de ropa que están denunciadas en la justicia por contratar talleres con trabajadores en situación de semi-esclavitud son:

Mimo, Gabucci, Kill, Tucci, Chocolate, Martina Di Trento, Yagmour, Ona Saez, Cueros Crayon-Cueros Chiarini, Claudia Larreta, Portsaid, Awada-Akiabara, Normandie-Nmd, Muaa, Puma, Topper, Adidas, Duffour.

3) COMO CIUDADANOS: cuando no ejercemos presión política ninguna para que no se repriman las protestas legítimas de los trabajadores. Cuando no nos interesa informarnos sobre lo que está pasando, ni elevar nuestra voz para que no suceda.

Un ejemplo de nuestra desinformación es la situación de los ajeros de Mendoza, que relató hace poco Osvaldo Bayer en los siguientes términos.

"Son los más ignorados de estas tierras, e informé cómo se rebelaron porque la gigantesca empresa rural Campo Grande, de Adrián Sánchez, no depositó los descuentos jubilatorios durante doce años. Esas mujeres y hombres de manos como raigambres y ajadas hasta el extremo decidieron la protesta, formaron una columna frente a la enorme propiedad rural. Allí fueron desalojados por orden de la fiscal de turno Liliana Giner, en algo habitual en la historia mundial de los desposeídos: no se detuvo a los patrones estafadores del bolsillo humilde sino que se apaleó a los eternamente estafados. Los palos uniformados de la Justicia argentina fueron dados con todo gusto. Hubo rostros ensangrentados de obreras embarazadas y cabezas y espaldas apaleadas como bolsas. Esto fue en noviembre pasado. Ahora se informó que acaba de morir uno de los que levantaron la voz de protesta. El delegado Juan Carlos Erazo, en el hospital donde estaba internado por los golpes recibidos hace más de cuatro meses, perdió la batalla para siempre. Juan Carlos Erazo. Por algo será. Por protestar; el arma eterna de los proletarios. Sí, era pobre, y eso hay que tenerlo en cuenta cuando se sale a la calle. Pobre que protesta, pobre que la paga caro. La empresa no reincorporó a los delegados despedidos. No cumple la orden de blanquear la empresa con toda la peonada en negro."

¿Qué responsabilidad nos cabe en esto? Como mínimo informarnos. Si estas cosas pasan y se permiten y siguen pasando, es porque nadie dice nada. A los trabajadores pobres se les pega porque a nadie le importa. Y eso es lo que duele.

4 comentarios:

  1. El tema que planteas esta bueno. Antes que nada, me sorprendi al ver la miseria que se les paga, por un trabajo agobiante. Pensar que ahora, reclaman 100 dolares con esfuerzo, y sigue siendo muy poco dinero para satisfacer sus necesidades y tal vez, las de sus familias. La falta de importancia, de los derechos humanos, en este caso, va de mal en peor.

    En cuanto a nuestro rol como empleadores, consumidores y ciudadanos, no tengo duda que lo que decis es verdad. Se me viene a la mente, tu nota de la solidaridad, donde nos unimos ante "x" causa para ayudar. Tal vez este caso, resulta siendo una oportunidad para darnos cuenta de la realidad que viven estas personas en Bangladesh, y poder hacer justicia a estos trabajadores y a los que fallecieron por el derrumbe.

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  2. El trabajo en negro, el trabajo esclavo, la agresión, la situación de la gente pobre trabajando para marcas que compramos pareciera inevitable. Al caso de Bangladesh la gente lo justifica con "Siempre va a existir" "asi es el mundo" "es lo que hay" pero claro, pensemos un segundo, tomemos un minuto para pensar de verdad en este problema.

    Tenemos que hablar por ellos, por ellos indefensos que no pueden salir de la situación. En realidad no tenemos, sino que deberiamos querer hacerlo, si estuviesemos de verdad informados sobre el tema querriamos ayudar y nos concientariamos un poco.

    Podemos empezar entonces, contarlo, y unirnos a alguna organización en contra de trabajo esclavo para ayudarlos. Ser solidarios no solo cuando hay una causa x, como dice Camila.
    Pero para empezar, dejar de comprar en estos locales, y poco a poco concientizar a todos los que más podamos.
    Como nos llegó a dejar de importar la vida de los otros con tal de ganar dinero? A tipo de sociedad individualista pertenecemos? Es increible el maltrato humano que puede ocasionar un mismo humano solo por el hecho de ganar más dinero

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  3. es un horror la historia que tiene una simple remera de algodon. en que condiciones se hiso? el que la cocio, cuanto fue su sueldo? fue un trabajo esclavo?
    muchas veces vemos a este nuevo grupo de "veganos" y hippies, quienes no comen carne ni nada derivado de animales, no usan maquillaje probado en animales, y tampoco usan cosas de cuero. pero nunca se pusieron a pensar, que talves un simple pantalon de jean podria haber venido de un lugar asi, es importante informarnos de que esto esta pasando ahora, y la gente lo ve pasar de largo como si fuese algo normal.

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  4. En cierto sentido esta nota se relaciona con la mía. Sobre como nosotros solo estamos conscientes del producto final, y no sabemos nada de como llego hasta el negocio ni las política discriminadoras del local (como las de Abercrombie and Fitch). Yo no creo que nadie coincida con estas cosas que pasan, pero lamentablemente nadie hace nada tampoco y me incluyo en eso.

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