viernes, 15 de marzo de 2013

CASADO O CAZADO?


Últimamente, me llamó la atención que la mayoría de las veces que le pregunto a la gente que conozco, de mi alrededor sobre sus padres, o padres de conocidos, la respuesta más común es “y mis papas están divorciados” o “si, se divorciaron hace poco”.
Me pregunté a mi misma posibles motivos por las que dos personas que una vez se amaron podrían querer separarse. Las razones más comunes que encontré fueron por infidelidad, falta de dinero y problemas económicos, la relación trabajo-familia (la falta de balance en el tiempo que se invierte en la familia y el que se invierte en el trabajo), las discusiones por la crianza de los hijos, por violencia, alcohol y problemas de salud.

Pero más allá de las razones comunes, reflejadas en estadísticas como la que vemos en el cuadro superior que se refiere a Argentina, yo misma me pregunté: ¿Esto dependerá de la época?  ¿Por qué las personas de antes que una vez casados, vivían “felices para siempre”, hoy se divorcian con mayor frecuencia?
Y rápidamente a mi cabeza llegó el recuerdo de una entrevista en una revista que leí hace unos meses. Trataba sobre un señor de 70 años aproximadamente que cumplía 50 años de casado con su mujer; el entrevistador rápidamente preguntó como hacía para estar hace tanto tiempo casado con la misma persona. El señor en una simple y clara respuesta dijo: “porque a mí me enseñaron que lo que se rompe, se arregla”
Mi opinión personal es que hoy vivimos en una sociedad en la que la tecnología nos impone velocidad y constantes cambios, donde la adolescencia interminable crea personas egocéntricas e individualistas, en una sociedad que convence al varón que en vez de estar casado esta “cazado”. ¿Es posible que nos falte tolerancia? ¿Luchar por lo que queremos? ¿Comprometernos?. Igualmente me parece válido que uno pueda separarse de alguien si básicamente dejo de amarla o no cumple con las condiciones para seguir en pareja.  Valoramos la cultura del cambio y de lo descartable antes que lo estable y perdurable. 

2 comentarios:

  1. En mi opinion, la sociedad esta acostumbrada de un dia para el otro cambiar el celular, o el auto. Y eso tambien pasa con la pareja. Se aburren y una minima pelea o defecto (en comparacion a los años que estuvieron juntos y a la fuerte relacion que tenian) del otro hace separar la pareja.
    Ese comentario del señor de la entrevista me puso la piel de gallina, ya que (sere antigua) pero la verdad que coincido con el. Porque dejar a tu pareja por un simple error o defecto? Acaso no hay que luchar por lo que uno quiere tener y ama tener? Si realmente te enamoras, para mi que luchas como sea

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  2. Buena nota Sofía. Sobre todo es importante el enfoque, que pasa del individual (las parejas se pelean/separan por tal o cuál motivo) al social (vivimos en una época en la que...)

    Efectivamente la época en la que vivimos ha cambiado, entre otras cosas, la forma de las parejas, su duración, etc. De hecho, hace muy pocos años que el divorcio es posible en nuestro país (fíjense por favor, porque van a sorprenderse). Pero, tal como decís, la aceleración en la velocidad de los cambios y la sociedad de consumo proponen otros modelos de relación sexual/amorosa a los que funcionaban hace pocas décadas. Vamos a ver pronto este tema cuando trabajemos sobre la "sociedad líquida". Quien quiera profundizar puede leer el libro de Zygmunt Bauman "Amor líquido".

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